El primer ministro británico, David Cameron, reconoció tras participar en su último Consejo Europeo que le hubiera gustado que el resultado del referéndum fuera otro, pero dijo no arrepentirse de haber convocado la consulta que separará al Reino Unido de la UE tras 43 años.
La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que el mercado único está y seguirá ligado a la libre circulación de ciudadanos comunitarios. “Nos aseguraremos de que las negociaciones no van a seguir el principio del picoteo, de esto sí y esto no. Tiene que haber y habrá una distinción clara entre un país que quiere ser parte de la familia de la UE y otro que no. Si alguien decide abandonar esa familia no puede pretender que se omitan todas las obligaciones y que mantenga sus privilegios”. Merkel afirmó que no ve "ninguna manera de revertir" la salida del Reino Unido de la UE y señaló que no es el momento de hacerse ilusiones, sino de asumir la realidad.
La jefa del Gobierno alemán declaró que en la cena de la cumbre, en la que el primer ministro británico, David Cameron, ha dado explicaciones sobre el referendo y no se ha abordado la posibilidad de que Londres no active el artículo 50 del Tratado de Lisboa para iniciar el proceso de salida.
El presidente de Francia, François Hollande, dijo que "no hay que castigar al Reino Unido", pero subrayó que el país ha "asumido un riesgo" y "durante un tiempo, va a sufrir las consecuencias". Reiteró la necesidad de ir “rápido" en el proceso de negociación.
Sobre si la salida del Reino Unido puede dar alas a otros euroescépticos y provocar la petición de otros estados miembros de salir de la Unión, Hollande dijo que "va a ser una experiencia" que mostrará "si es mejor estar dentro o fuera".
Hollande descartó asimismo la posibilidad de un segundo referéndum, a pesar de la petición por parte de los británicos partidarios de la permanencia, e incidió en que "hay que respetar el voto" y "para saber qué es lo que ocurre".
No hay comentarios:
Publicar un comentario