viernes, 7 de abril de 2017

América Latina crecerá en 2017 pero debe bajar desigualdad e informalidad



El Fondo Monetario Internacional (FMI) aseguró hoy que, si bien se espera que la economía de América Latina vuelva a crecer en 2017, la región debe seguir esforzándose en mejorar la competitividad, favorecer el cierre de la brecha de infraestructura y reducir la desigualdad y la informalidad laboral.

Así lo expresó el director gerente adjunto del FMI David Lipton, quien realizó una visita a Buenos Aires para participar en el Foro Económico Mundial para América Latina, que concluye este viernes.

"Nos reunimos en un momento en que la región continúa enfrentándose a un entorno desafiante caracterizado por una demanda externa más lenta, el fin del superciclo de los productos básicos y una mayor incertidumbre política en los países avanzados", expresó Lipton en un comunicado.

El crecimiento regional, en su opinión, se espera que vuelva a ser positivo este año, "después de la contracción en 2016" y está programado para "seguir aumentando gradualmente" el próximo año.

"Sin embargo, los factores domésticos seguirán desempeñando un papel importante en muchas economías", alertó.

Lipton consideró que los países "deben proseguir sus esfuerzos para aumentar la resiliencia", particularmente mediante la "búsqueda y calibración" de sus ajustes fiscales y permitir que los tipos de cambio fluctúen para amortiguar los 'shocks' externos.

"Mirando hacia adelante, además de mantener la estabilidad macroeconómica, la región debe proseguir sus esfuerzos para mejorar la competitividad y el crecimiento y asegurar que los beneficios puedan ser compartidos más ampliamente", remarcó el director del FMI.

Ese "programa de reformas", como lo definió, incluye el cierre de la "brecha" de infraestructura, la reducción de la desigualdad y la informalidad del mercado de trabajo, la mejora de los resultados educativos y el fomento de la integración económica regional.

De Argentina, argumentó que el Gobierno de Mauricio Macri, que llegó al poder en diciembre de 2015 tras doce años de los Gobiernos peronistas de Néstor Kirchner (2003-2007) y su esposa, Cristina Fernández (2007-2015), se ha embarcado en un conjunto de reformas "muy necesarias y bienvenidas" para eliminar "distorsiones y desequilibrios" generalizados en la economía.

Asimismo, concretó que aunque estas reformas "pueden ser desafiantes y tomar algún tiempo para dar sus frutos", un esfuerzo sostenido proporcionaría la base para un crecimiento más alto, más "sostenible e inclusivo".

"Hay señales tempranas de éxito de la política. Esperamos que la economía rebote este año y el próximo y la inflación continúe disminuyendo", concluyó. (07/04/2017)

No hay comentarios:

Publicar un comentario